Las válvulas de control direccional son aquellas encargadas de cambiar el flujo del aire comprimido que va hacía los cilindros, pinzas neumáticas, entre otros. En otras palabras, determinan el paso del aire al cambiar, abrir o cerrar sus conexiones internas permitiendo controlar la extensión y retracción de un cilindro, la apertura o cierre de una pinza neumática o el giro de un actuador rotativo.
Las válvulas pueden ser monoestables o biestables. Las monoestables tienen una posición determinada a la cual regresan una vez que la señal contraria se desactiva. En cambio, las biestables no tienen una posición en especial por lo que, al desaparecer la señal contraria, permanecen en el mismo lugar sin cambiar a otra posición, a menos que se active una señal.
Se nombran a partir del número de vías (número de conexiones que tiene la válvula), número de posiciones (número de maniobras que puede realizar), posición normal y método de activación. Estas válvulas pueden ser activadas de diferentes maneras, ya sea mecánica, eléctrica, neumática o manualmente.
Dependiendo de la aplicación para la que se requiera, se pueden escoger diferentes modelos a partir del número de posiciones, la forma de activación, si es monoestable o biestable, montaje, conexiones, etc. Se pueden escoger también de manera individual o en manifold.
Las series de SMC de válvulas de control direccional son las siguientes: